Mi reflexión.
Durante mis treinta años de labor
docente he tenido muchas experiencias llenas de aprendizajes que me han hecho
crecer como docente.
La mayoría de mi labor docente la
he realizado en escuelas bidocentes y unitarias del medio rural y estos últimos
seis años los he terminado en escuelas de organización completa y desde hace
dos mi escuela entro en el esquema de JORNADA AMPLIADA.
Siempre me ha gustado mi labor y
considero que parte de ello fue gracias a mis padres, quienes también fueron (se
encuentran jubilados) profesores de educación primaria. Yo vivía, miraba, ayudaba,
etc. en lo que podía y me pedían para preparar sus clases, arreglos para algún evento
de la escuela, material para sus clases. Me gustaba estar en sus escuelas,
ellos nunca me dieron clases pero sí estaban al pendiente de mis estudios y
pues claro tenía dos maestros que me apoyaban en casa.
Nuestro trabajo más que físico es
mental las personas que no tienen idea
de lo que es la labor docente en muchas ocasiones dicen que los maestros no
trabajamos. Aprovecho este comentario para contarles una anécdota.
En una ocasión una exalumna me
visitó en la escuela y llegaron unas autoridades de la SEP y sindicales a mi
escuela. Las personas que nos visitaron iban a llevarme información importante
por lo cual le pedí de favor a mi exalumna; que para entonces tenía 17 años, me
hiciera favor de cuidarme unos minutos a mis alumnos, mismos que tenían actividades
que realizar (tenía en total 14 alumnos de los grados de 1°, 2°, 3°,4°, 6° sólo
quinto grado no había). Entonces termino de atender a los visitantes y al
regresar al grupo mi exalumna me dice: “Maestro, que bueno que ya regreso, no
sé cómo le hace para aguantar a estos chiquillos”, solté la risa y le dije que
así como ella veía a esos niños ella también estuvo y quiero decirte que tú
eras de las niñas inquietas.
Nuestra labor es bonita pero muy
comprometida, en la mayoría de las ocasiones pasamos horas extra en casa
buscando material para las clases o actividades a desarrollar con nuestros
alumnos o calificando actividades y descuidamos
algo nuestra familia. Y cuando oigo que algunos padres de familia dicen que
sólo trabajamos unas horas siempre
estamos sentados en nuestra silla del escritorio en lugar de enojarme me rio
para mis adentros pues no tienen ni idea de lo que es nuestra labor.
Con el paso de los años me he ido
adaptando a los cambios buenos y malos que han implementado las autoridades de
la SEP como del SNTE, han tenido sus aciertos
errores y los que tenemos que pagar las consecuencias somos nosotros y
de paso los alumnos. Los cambios en las metodologías, libros de texto,
planeaciones, etc. se han dado siempre, aunque muchos sólo por la finalidad de
sacar dinero para los bolsillos de las autoridades de primer nivel. Pase por el
método onomatopéyico, silábico, global, etc. Y por el conductismo y constructivismo y en estos años ya la educación a tomado como
bandera las tecnologías de la información
comunicación y es ahí donde muchos profesores se quedan estancados por resistirse
al uso de las mismas.
Las TIC’s son importantes de
acuerdo del uso que les demos el tiempo
que las utilicemos en clase. Existen profesores jóvenes que creen que usando la
tecnología toda la jornada laboral sus
alumnos van a llegar a apropiarse de los aprendizajes esperados y eso no es
posible pues debe de existir un balance para que los alumnos desarrollen no
sólo el dominio de las TIC’s; muchos alumnos en ese sentido superan a los
profesores, sino también tienen que desarrollar más capacidades que les facilitaran
resolver situaciones en su vida cotidiana.
Mi salón siempre trato de tenerlo
limpio y ordenado, de ello se encargan mis alumnos ya que ellos trabajan en él,
yo sólo me encargo del área del escritorio.
Las clase trato hacerlas
agradables y motivadoras trato de prender el mis alumnos la curiosidad, el
interés por conocer, saber y la sana competencia cuando en equipos se trabaja.
En la evaluación siempre he sido,
(así lo considero), justo y apegado siempre a las evidencias, logros de mis
alumnos los aprendizajes logrados así
como las áreas de oportunidad que ellos tienen y además de un examen que puedo
hacerlo oral o escrito me dan la referencia para evaluar y posteriormente darle un valor numérico a
esa evaluación. Profesores se meten en problemas por no tener un registro de o
que sus alumnos van haciendo, alcanzando o no han logrado todavía y en muchas
ocasiones se meten en problemas con padres y/o alumnos inconformes con esos
reportes de evaluación. Tal vez a comienzo sea muy cansado estar llevando una
lista de cotejo, hacer una rubrica, levar un diario de clase o un registro de
aspectos que observamos de cada uno de nuestros alumnos pero si lo hacemos con el tiempo agarramos la práctica y
se nos vuelve tan sencillo como caminar o respirar.
Mi vida ha estado siempre inmersa
en el ambiente educativo considero que
nací para ser profesor y espero llegar a mis últimos días con la satisfacción
de haber hecho mi labor en beneficio de mis semejantes, de haber sembrado buenos valores a mis alumnos
y haberles sido de ejemplo para ellos y sus padres, así como de haber sido
parte de la vida de cada uno de ellos y haber colaborado a dar forma a ese
ciudadano de provecho para nuestra nación. Y tener en mi memoria la alegría de
haber sido un profesor responsable en mi labor
con mi familia.
Salvador S. N.
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